En Piedecuesta, Santander, decidieron convertir llantas en obras de arte, ya que están realizando un "zoológico" de caucho en la calle con materiales desechables. Esto es una buena alternativa para que esos elementos mencionados no se vayan a la basura y, en cambio, se transformen en un entretenimiento para los niños que pasan por las calles.
En Piedecuesta los menores se montan en jirafas, leones, pavos reales y toros.
Es la creación de Orlando Pérez, un santandereano de 43 años, que en medio de la pandemia crea estas obras volviéndose muy llamativas para la comunidad. "Yo todo lo que utilizo son llantas que botamos, le doy otra vida y forma, ese es mi arte, mi pasión, duré muchos años como jardinero, me gusta enfocarme en los animales, mi mamá quería un loro pequeño, se lo hice con una llanta, y así inicié, el último es un rinoceronte grande, pesa como 150 kilos, una jirafa que es grande también”, menciona.
No solo hay animales, también hay macetas disfrazadas de personajes infantiles como los Minións, Angry Birds y de otras figuras mágicas bajo las llantas. Es arte que quizá solo se ve en las calles de Piedecuesta, pero que vale la pena resaltar el talento que viene de generación tras generación. "Mi papá fue artesano desde hace 20 años, yo creo que va de la mano, tengo un poco de él, me gusta ese arte, pero no lo había explotado", dijo el artista.
Muchas de las llantas se convirtieron en flores coloridas y formas de pozos. Así pues, se vuelve un talento que combina el arte y la conservación del medio ambiente en Santander, Colombia.