Un grupo de activistas de la organización ambientalista Greenpeace inmovilizó maquinaria del Tren Maya, argumentando que dicha construcción está deforestando la selva local. En total, ocho integrantes se ataron a las máquinas para demandar la suspensión inmediata del Tramo 5, el cual va de Cancún a Tulum.
“El trazo ha sido cambiado hasta cuatro veces sin respetar la promesa del tren sobre el derecho de vía existente, adentrándose en la selva y sin contar con una manifestación del impacto ambiental”, denunciaron.
De igual manera, advirtieron que los daños a la flora, fauna y ríos subterráneos serán irreversibles a menos que se cambie el trazo actual del Tramo 5.
Al respecto, los activistas invitaron al pueblo mexicano a unirse a su petición para frenas estas obras, lo anterior a través de una recolección de firmas mediante la plataforma Actúa.
“Si este proyecto continúa sin considerar los impactos en el medio ambiente, perderemos la riqueza natural que ha puesto a México como uno de los países más hermosos del mundo”, alertaron.
“Los cenotes que albergan vida, se destruirán. Las especies como el jaguar, símbolo de la herencia cultural maya, se quedarán sin su único hogar”, agregaron.
Finalmente, los miembros de la organización con sede en Ámsterdam, Países Bajos, quienes estuvieron desde las 07:00 hrs en el municipio de Solidaridad, anunciaron que mantendrán sus protestas durante los siguientes días.