El cambio climático podría intensificar el riesgo de que aumenten los casos de enfermedades como la malaria y tuberculosis, advirtió Peter Sands, director ejecutivo del Fondo Global, organización que desde hace 20 años financia la lucha en contra de estos padecimientos a nivel mundial.
Durante una rueda de prensa en la que se repasó el último año de trabajo del Fondo Global, Sands explicó que la crisis climática está aumentando la cantidad de fenómenos climáticos extremos, tales como huracanes, tifones e inundaciones, una situación que, de seguir así, causará un grave impacto a redes sanitarias y extenderá el riesgo de infección de este tipo de enfermedades.
Específicamente en el caso de la malaria, detalló, aumentaría la distribución geográfica de las regiones cálidas en la que es endémica. Por ejemplo, los mosquitos (Anopheles) que la transmiten cada vez pueden tener su hábitat a mayor altitud, esto a medida que también sube la temperatura global.
En cuanto a la tuberculosis, ésta cubre con mayor facilidad aquellas zonas con alta concentración de gente sin adecuada alimentación y alojamiento.
“(malaria y tuberculosis) Están aumentando su propagación en regiones como Centroamérica. Sin embargo, poco a poco está avanzando en países de Sudamérica, especialmente en Venezuela”, alertó Sands.