Sin duda, México es un país donde sus habitantes aman la cerveza. De acuerdo con Cerveceros de México, el consumo promedio de esta bebida por persona ronda los 6.1 litros al mes.
Aunque la botella estándar de cerveza posee una capacidad de 355 mililitros, a lo largo y ancho del territorio nacional puedes encontrar una gran diversidad de tamaños en los diversos establecimientos comerciales. Lo interesante es que cada uno de estos envases cuenta con un nombre popular, según sus características y la región en donde se beba.
Por ello, a continuación te diremos la historia detrás de las palabras "caguama", "ampolleta" y "ballena" con las que se refiere a la cerveza.
Caguama
La caguama es una de las presentaciones más famosas de la cerveza en nuestro país. Este envase tiene una capacidad de 940 mililitros, por lo que es considerada como una botella familiar. Fue en el año 1960 cuando la cervecería Carta Blanca produjo por primera vez un envase con estas dimensiones. El nombre está inspirado en el enorme caparazón de las tortugas caguamas, animales marinos que habitan en el Mar Caribe, y su consumo era habitual en distintos estados como Oaxaca, Sinaloa, Sonora y la Península de Baja California.
Ampolleta
De acuerdo con los diccionarios, las ampolletas son pequeños recipientes de vidrio, los cuales están cerrados de forma hermética y, regularmente, contienen una dosis de medicamento. La palabra ampolleta se emplea para referirse a los envases de cerveza de 210 mililitros, debido a su diminuto tamaño y capacidad reducida.
Ballena
Al igual que las caguamas, el término “ballena" se utiliza como un sinónimo de la presentación familiar de la cerveza. Sin embargo, el uso de esta expresión es casi exclusiva de la ciudad de Mazatlán, Sinaloa, gracias al lanzamiento del envase ballena de la cervecería Pacífico. Hace referencia directa al gran tamaño de este mamífero marino, cuyos avistamientos son recurrentes en las costas mazatlecas.