La Organización Mundial de la Salud (OMS) asignó letras del alfabeto griego a las variantes de coronavirus más preocupantes. La medida tiene como finalidad simplificar el debate y la pronunciación de los nombres, pero sobre todo evitar que se estigmaticen países o regiones (sin ir más lejos, el expresidente Donald Trump llamó al nuevo coronavirus “el virus de China”).
Las variantes de coronavirus consideradas más preocupantes por la OMS son las conocidas hasta la fecha como las de Reino Unido, Sudáfrica, Brasil e India. Estas han recibido el nombre de Alfa, Beta, Gamma y Delta, según el orden de su detección, según informa Reuters.
“Si bien tienen sus ventajas, estos nombres científicos pueden ser difíciles de decir y recordar, y son propensos a informar erróneamente”, dijo la agencia de la ONU al explicar el porqué de su decisión. La elección del alfabeto griego se produjo después de meses de deliberaciones en las que se consideraron otras posibilidades como la de aplicar nombre de dioses griegos, inventados o pseudoclásicos, explicó el bacteriólogo Mark Pallen, que participó en el proceso de la OMS.
A lo largo de la historia muchos virus han recibido el nombre de los lugares en los que se cree que han surgido. Es el caso del ébola, que recibe su nombre del río congoleño homónimo o la llamada gripe española de comienzos de siglo XX, aunque en este caso sus orígenes aún son desconocidos. El problema de utilizar esta denominación para virus y enfermedades es que a menudo se generan conductas discriminatorias contra los lugares cuyos nombres son acuñados.