Agandalle en el PRD
Peligroso confiar en el futuro incierto
- Durante 2017, el señalamiento de la oposición para desgastar a la maestra Delfina Gómez fue en el sentido de que era manipulada por el senador Higinio Martínez. Lo que son las cosas, ahora es la gente de Martínez Miranda quien reconoce que la maestra no se ha acercado. La elección pasada, el Grupo Texcoco era uno; ahora, inevitablemente, se fracturó en tres. El Grupo de Acción Política (GAP) sigue siendo del senador, pero ya sin la coordinadora de los comités de defensa de la 4T ni el jefe de Aduanas, Horacio Duarte.
- Independientemente de los discursos, en todos los partidos políticos es la cúpula en funciones quien da el visto bueno a los candidatos; la única diferencia son los métodos, algunos más democráticos, al menos en apariencia, mientras en otros es más evidente el dedazo. Pero el partido en que más se nota el agandalle en los últimos años, es el PRD, presa histórica de sus tribus, donde ni las formas guardan: Omar Ortega no es el único perredista que ha manifestado su interés en la candidatura al gobierno estatal, pero sí el único considerado por las dirigencias, sin siquiera un proceso interno simulado, como los de Morena o el PRI. En el PAN no hay olas porque Enrique Vargas ha trabajado, desde hace muchos años, los consensos en su favor.
- Mario Delgado, el dirigente nacional de Morena, hace mal al confiar en que es posible la coalición con el PVEM, NAEM y el PT para la gubernatura del Estado de México y en que esta aportará un porcentaje de votos suficientes. El Verde mexiquense, de manera histórica, se ha conducido con cierta libertad para definir su política de alianzas, y su dirigente y principal aspirante, Pepe Couttolenc, asegura que es su interés participar solos, sin contar que en la entidad ha postulado a varios priistas como Miguel Samano, Aarón Urbina o Luis Miranda Barrera. Nueva Alianza está diluido por la disputa entre Mario Cervantes y Rigoberto Vargas, y el PT, según las encuestas, aportará un punto porcentual. Con todo y que los "amarres" se hagan a nivel nacional, los dividendos podrían no ser los esperados.