- Si hacemos un balance del 2019, aunque hubo disminuciones en delitos como robo de autos, las extorsiones van a la alza, el robo en otras modalidades también y la descomposición social sigue. 2019 fue un año violento, nadie lo puede negar.
- Y hablando de inseguridad, pensar que los robos sólo representan delitos patrimoniales sería ser muy optimista. Y es que también afectan, por ejemplo, la productividad en las empresas, pues hay zonas como el Parque Industrial Exportec, donde la inseguridad se convierte en excusa para el ausentismo.
- El operativo torero por parte de los ambulantes se ha intensificado. Llegan a una esquina, venden dos o tres productos, monitorean la presencia de la policía y si ven a un inspector, recogen todo, esperan a que se vaya y se vuelen a poner. Regularlos es una opción que los gobiernos municipales deberían considerar.