Luego de 15 días de iniciar un incendio forestal en el Altiplano de Tamaulipas, que ha arrasado más de 3 mil 500 hectáreas de vegetación de la sierra, autoridades de Protección Civil lanzaron una alerta por el agotamiento de las fuentes de abastecimiento de dos helicópteros para combatir el fuego y que no se extienda a más municipios.
Ante la emergencia, autoridades de municipios cercanos, entre ellos el de Jaumave, pidieron a los habitantes trasladar contenedores con agua en vehículos hasta Miquihuana.
Pese a los riesgos por el incendio, lugareños se han sumado a los trabajos para realizar brechas cortafuegos entre la sierra.
No obstante, los fuertes vientos de los últimos días han impedido que las dos brigadas del Estado y las dos de Conafor extingan las llamas, que han afectado la zona boscosa de pinos en Miquihuana y Bustamante.
El director de Protección Civil de Bustamante, Martín Becerra, indicó que se acabaron las fuentes de abasto de las dos aeronaves de los Gobiernos federal y del estado, luego de que el incendio forestal se ubica en la principal región árida de Tamaulipas.
"Ya se quemó una gran parte la zona más boscosa, y empezó la crisis por el agua, no hay agua para tratar de combatir el fuego", externó.
Becerra señaló que los equipos del área de operaciones aéreas de Protección Civil del Estado, buscan fuentes de abastecimiento alternos, para recargar y regar el agua en lugares estratégicos con el fin de frenar el avance del incendio.
"Están batallando para llenar las 'calabazas' de las aeronaves, porque se acabó el agua", subrayó.
Hasta el pasado 20 de abril el coordinador de Protección Civil del Estado, Pedro Granado, puntualizó que el siniestro había arrasado una superficie de alrededor de 2 mil 800 hectáreas, que a la fecha supera las 3 mil 500 hectáreas.
A mitad de semana el fuego se aproximó a pocos kilómetros de las comunidades con población, pero no fueron desalojados.
El temor crece entre los habitantes, luego de que las brigadas lograron controlar un 70 por ciento del incendio en Bustamante, pero los fuertes vientos lo reavivaron.
A su paso las llamas han quemado monte de pino, cedro, follaje, plantas de sotol, matorral, y una especie de guapilla.
Comunidades de católicos del Altiplano llevaron a cabo jornadas de oración para implorar por la lluvia y el fin de los incendios.
Por medio de redes sociales grupos de activistas han convocado a los voluntarios a que se sumen a las brigadas contra los incendios.
La Asociación por la Justicia, Paz y Plenitud en México pidieron a la población incorporarse al combate del fuego en la sierra del Altiplano.
"Se hace un llamado urgente a la sociedad civil que desee participar como voluntarios, hombres y mujeres mayores de edad", dijeron. Autoridades municipales también solicitaron el apoyo de víveres para las familias de los voluntarios, que se han sumado al combate de los incendios forestales en la región del Altiplano de Tamaulipas, que se integra por Jaumave, Palmillas, Miquihuana, Bustamante y Tula.