Con gritos clamando "¡No más a la impunidad!", integrantes de la Asociación de Familiares Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos en México (AFADEM) marcharon por las calles de Atoyac de Álvarez. La movilización fue encabezada por la vicepresidenta de la AFADEM, Tita Radilla, quien lleva más de 40 años exigiendo la presentación con vida de su padre, Rosendo Radilla Pacheco, quien fue desaparecido por el Ejército mexicano durante la década de los setenta, en Atoyac.
La protesta de este domingo, a razón del Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas, comenzó en las instalaciones de la Ciudad de los Servicios, que en los setenta funcionó como cuartel del Ejército y donde, según informes oficiales, fueron llevadas decenas de personas detenidas que nunca volvieron a aparecer.
Con pañuelos blancos y portando cubrebocas, familiares de los desaparecidos arribaron al Zócalo de Atoyac, donde se montó una exposición fotográfica de personas desaparecidas por el Ejército y las guardias blancas de la desaparecida Dirección Federal de Seguridad (DFS).
Tita Radilla recordó que han pasado más de cuarenta años de estos hechos y en el país, en Guerrero, sigue habiendo desapariciones: "La Cuarta Transformación que pregona este Gobierno, que encabeza el presidente Andrés Manuel López Obrador, debe demostrar si en verdad hará justicia por la gente que la exige ante la desaparición o asesinato de un familiar. Las exigencias son verdad y justicia, medidas de no repetición y reparación integral", dijo.
La activista denunció que, en cuanto a las medidas de no repetición por parte de este Gobierno, se han negado, minimizado e invisibilizado: "Se está escondiendo este flagelo que lacera no sólo a las familias, sino a toda la sociedad. Aquí en Chilpancingo, familiares de personas desaparecidas y asesinadas en Guerrero realizaron una protesta en el Zócalo en demanda de justicia".