En noviembre del año pasado el Presidente Andrés Manuel López Obrador exigió el pago de más de 200 millones de dólares a cambio de otorgar el perdón a Alonso Ancira.
Ayer, el empresario consiguió su libertad tras ofrecer pagar en tres abonos a Pemex, 216.6 millones de dólares como reparación del daño por venderle con sobreprecio la planta chatarra de Agronitrogenados, ubicada en Veracruz.
En el 2013, el entonces director de Pemex, Emilio Lozoya, autorizó la compra de la planta, que desde 1999 no operaba, en 273 millones de dólares, 10 veces más de su valor real.
El juez Artemio Zúñiga Mendoza suspendió ayer el proceso de lavado de dinero y ordenó liberarlo.
Sonriente, de traje negro y camisa blanca, con un habano en mano, el empresario abandonó el Reclusorio Norte ayer a las 19:30 horas en una camioneta G-500 Mercedes Benz, color negro, placas 303VF. No hizo declaraciones a la prensa.
Si bien el Gobierno Federal siempre sostuvo que Altos Hornos de México (AHMSA) "infló" el valor de la planta de Agronitrogenados para venderla a Pemex en 274 millones de dólares, lo cierto es que el sobreprecio nunca fue materia de la imputación penal contra Ancira.
Es decir, nunca le fincó un ilícito relacionado con el precio desproporcionado, aunque sí le cobró la supuesta sobrestimación de 216 millones de dólares como reparación del daño.
Lo único que fue materia de la imputación es el monto del presunto soborno a Lozoya.
Ancira presentó como obligados solidarios a Jorge Alberto Ancira Elizondo, Xavier Autrey Maza y AHMSA. La empresa liquidará la suma en tres entregas de 72 millones 221 mil 346 dólares cada una, los días 30 de noviembre de 2021, 2022 y 2023.