El presidente Andrés Manuel López Obrador informó este viernes que junto con los empresarios está delineando una estrategia a fin de que los 24 productos de la canasta tengan un precio uniforme sin que ello implique un control por parte del gobierno.
Esta semana, el mandatario federal se reunió con los principales distribuidores y productores de alimentos a fin de controlar la inflación que se está registrando mes con mes en algunos productos básicos y plantear soluciones para beneficiar al consumidor.
En conferencia de prensa desde Palacio Nacional, el jefe del Ejecutivo mexicano afirmó que todos los empresarios reunidos, como los representantes de Walmart, Chedraui, Soriana, entre otros, se comprometieron a apoyar el plan antiinflacionario.
-“(Se van a ir) Definiendo claramente precios de la canasta básica, que no haya aumentos. -¿Una especie de precios máximos?, se le cuestionó. -Algo como un precio máximo, (pero) no es control de precios, se va a llegar a un acuerdo para decir que esta canasta de 24 productos, vamos ir incorporando más, va a costar tanto y por producto tanto”, adelantó.
“Fue muy buena reunión, les agradezco mucho a los productores, a los comerciantes. Se está trabajando de manera conjunta, lo importante es que se logró el acuerdo unánime de mantener precios sin aumentos de productos básicos, alimentos.
“Llegamos a ese acuerdo y otros. Lo importante es que todos estuvieron de acuerdo en ayudar. Hasta les dije, ‘yo sabía que ustedes iban a estar a la altura de las circunstancias e iban a ayudar y ¿saben por qué? Por México, porque todos le debemos mucho a nuestro país’ y todos empezaron a tomar la palabra, les expliqué de qué se trataba”, añadió.
El tabasqueño afirmó que el gobierno federal seguirá controlando los precios de los energéticos a fin de que las cadenas de producción, distribución y comercialización no tengan más presiones que los lleven a elevar los precios de sus productos.
“La parte energética dependía de nosotros y teníamos control y que nosotros teníamos que controlar el precio de los alimentos y que sabíamos que estaban subiendo precios de insumos y materia prima, pero que podíamos actuar y controlar la inflación”, reveló.
De acuerdo con el Inegi, los precios al consumidor en México subieron más de lo esperado en la primera quincena de septiembre, un 0.41%.
Por su parte, la inflación anual en la segunda economía más grande de América Latina trepó al 8.76%, casi en línea con el mes anterior, aunque también por encima del pronóstico de 8.71%.
Las cifras divulgadas refuerzan la probabilidad de otro aumento de la tasa de referencia cuando el Banco de México (Banxico) celebre su próxima reunión de política monetaria la próxima semana.
Fuente: Forbes México