El Senado abrió la posibilidad de que los mecanismos de protección de los derechos humanos no salgan de la esfera de influencia de la Fiscalía General de la República (FGR).
Visto el desacuerdo que afloró en el seno de las comisiones unidas de Justicia y Estudios Legislativos II, inclusive en legisladores de Morena, a propuesta del senador panista Damián Zepeda, se encorchetó el asunto de los mecanismos para revisarlo antes de que se ventile en el Pleno.
En tanto, en las dos comisiones prosperó, con la abstención del PRI, el proyecto de dictamen de la nueva Ley Orgánica de la Fiscalía General de la República con 61 ordenamientos.
El que la FGR pudiese desmarcarse del Sistema Nacional de Búsqueda de Personas; del Sistema de Protección Integral de Niños, Niñas y Adolescentes; del Sistema para Prevenir, Atender, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres, y de la Junta de Gobierno de Protección de Periodistas había generado protestas de colectivos defensores de los derechos humanos e, incluso, del subsecretario de Gobernación, Alejandro Encinas.
"Es como enterrar en una fosa común esta triste realidad (de vulnerabilidad de los derechos humanos)", previno la senadora morenista Nancy Sánchez, sobre la posibilidad de que la FGR se retirase de los mecanismos de protección de los derechos humanos.
El panista Damián Zepeda externó el desacuerdo de su bancada por el desmarque, y el emecista Juan Zepeda advirtió que el Estado abdicaría de sus funciones primordiales.
La morenista María Merced de plano planteó que la Fiscalía no se retirara de los mecanismos de protección de los derechos humanos.
Para el independiente Emilio Álvarez Icaza, un escenario en el cual se retirara la FGR representaría no solo una regresión sino que debilitaría la capacidad de respuesta del Estado. El perredista Miguel Ángel Mancera lamentó que la Fiscalía se apartara de funciones primordiales de defensa de los derechos humanos.