El paso del huracán “Eta” y de la depresión tropical “Iota” mantienen a 122 familias de la comunidad Yochibja, municipio de Chilón, al norte de Chiapas, fuera de sus hogares desde hace más de 15 días, ya que el pueblo permanece inundado y sus habitantes creen que podrían tardar hasta cuatro meses para que el nivel del agua vuelva a la normalidad.
Yochibja es una ranchería perteneciente al ejido San Jerónimo Tulijá, pero desde que el pueblo quedó bajo el agua, los indígenas tzeltales tuvieron que buscar refugio con familiares y conocidos en comunidades cercanas, llevando con ellos sólo lo que tenían puesto, ya que en la localidad dejaron sus enseres, ropa, documentos y aparatos eléctricos. También tuvieron que abandonar sus aves de corral, ganado vacuno, caballos, burros y semillas.
Cuando vieron que el pueblo empezó a inundarse como resultado de las fuertes lluvias que trajo consigo el huracán "Eta", salieron de sus hogares que ya empezaban a llenarse de agua y "todos tuvimos que ir a refugiarnos al cerro. Ya no pudimos sacar nada de nuestras casas", dijeron los tzeltales.
Durante estas dos semanas que han permanecido fuera de sus hogares, no han recibido "nada de ayuda" por parte del alcalde de Chilón, Carlos Jiménez Trujillo, dijo un vocero de los damnificados. En un documento que enviaron al secretario de Protección Civil, Luis Manuel García Moreno, los representantes de las 122 familias piden que los apoyen con una bomba y mangueras para extraer el agua de sus casas, que las mantiene llenas hasta los techos. De hacerlo, creen que podría tomar hasta cuatro meses para que el nivel del agua regrese a la normalidad y puedan limpiar su comunidad.
El frente frío número 13 dejó daños en 15 municipios ubicados en las regiones Norte, Selva, Fronteriza y Altos de Chiapas, informó la Secretaría de Protección Civil. El desbordamiento del río Agua Azul, en Chilón, dejó 134 viviendas inundadas y 73 encharcadas.