El trato que el Gobierno del Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, da a los menores inmigrantes en la frontera con México es comparable "con la tortura" tal y como se define en los acuerdos multilaterales, según un artículo publicano este viernes por un grupo de pediatras.
De acuerdo con el documento, publicado en el Diario Oficial de la Academia Estadounidense de Pediatras, la definición de tortura contra los niños se asemeja a la forma en la que la Administración del Mandatario republicano ha tratado a los menores inmigrantes detenidos.
Especialmente, la medida más citada fue la separación de los menores de sus padres en las zonas limítrofes.
La prohibición de la tortura -en particular contra los niños- forma parte de los Acuerdos de Ginebra.
Igualmente, recalcó el grupo de pediatras, la misma prohibición fue estipulada por la Convención de las Naciones Unidas contra la Tortura y Otros Tratos o Penas Crueles, Inhumanos o Degradantes (CAT).
En concreto, los pediatras hicieron referencia a los tres criterios siguientes: "infligir intencionalmente dolor o sufrimiento físico y/o psicológico severo", trauma con el "consentimiento y/o aquiescencia de las autoridades" y que el "trauma físico o psicológico es intencional y tiene un propósito específico, como coerción, intimidación, castigo y/o disuasión".
Sobre este último punto, los especialistas recordaron que el propósito reconocido por la Casa Blanca de Trump en torno a la política de "tolerancia cero", puesta en marcha en 2018, era disuadir a los indocumentados sobre llegar al país, por medio de métodos como la separación de los menores de sus familias.
Por otro lado, los médicos señalaron que muchos niños han sido recluidos bajo "condiciones insalubres y peligrosas", y que desde 2018, al menos 7 menores han perdido la vida en custodia de las autoridades o inmediatamente después de ser liberados.
Como resultado de esta clase de trato, explicaron los pediatras, los menores han mostrado un "comportamiento traumático internalizado y regresivo", el cual ha resultado en un "trastorno de ansiedad generalizada, depresión, trastorno de estrés postraumático e intentos de suicidio".
"La mitigación de este trauma requerirá años de tratamiento e intervenciones intensas", aseguraron. Todo ello, se apuntó en el artículo, fue "patrocinado por el Estado y dirigido por el Presidente de Estados Unidos".
En el pasado año fiscal, 30 mil 557 menores de edad que viajaban sin la compañía de un padre o tutor legal -en su mayoría centroamericanos- fueron detenidos en la frontera de EU y México.
A dicha cantidad hay que sumar otras 52 mil 230 personas que fueron aprehendidas cuando ingresaron ilegalmente a la Unión Americana en grupos familiares, es decir, un adulto acompañado, al menos, por un menor. Pese a las órdenes judiciales que obligaron a las autoridades fronterizas estadounidenses a reunificar a los niños que habían sido separados de sus padres, más de 600 menores siguen sin poder reencontrarse con sus familiares.