El potente tifón Khanun se acercaba el martes a la isla de Okinawa, en el suroeste de Japón, y azotaba la región con fuertes vientos y oleaje, además de obligar a suspender el transporte y a cerrar tiendas.
Khanun avanzaba lento hacia el noroeste a apenas 20 kilómetros por hora el martes en la mañana, con vientos de hasta 162 km/h. Se encontraba en el mar, al sureste de la isla principal de Okinawa, dijo la Agencia Meteorológica de Japón.
La oficina municipal de Naha, la capital de la prefectura de Okinawa, cerró el martes por los fuertes vientos, mientras que las cadenas de supermercados cerraron sus establecimientos o acortaron sus horarios.
Las imágenes emitidas por la televisora estatal NHK mostraron árboles caídos en las calles de Naha. Por el momento no se han reportado heridos.
Cientos de vuelos que debían despegar o aterrizar en el aeropuerto de Naha — entre ellos más de una docena de trayectos internacionales a Seúl, Hong Kong, Taipéi y Shanghái — fueron cancelados, según el aeropuerto. El transporte público en Okinawa, incluyendo los autobuses y el tren ligero en Naha, y los transbordadores que conectan la isla con tras cercanas, estaba suspendido.
El tifón seguirá avanzando hacia el oeste y se alejará del archipiélago japonés tras cruzar Okinawa el martes y se espera que deje tormentas y olas de hasta 12 metros de alto en la región, agregó la agencia meteorológica.
En Okinawa se esperan hasta 18 centímetros de lluvia en las próximas 24 horas, añadió.
Las autoridades advirtieron a los residentes de los violentos vientos y del oleaje, además de posibles inundaciones, y pidieron que se queden en sus cajas alejados de las ventanas.
Fuente: AP