Casimiro Curbelo, presidente del Cabildo de La Gomera, en España, ha sugerido bombardear el volcán de La Palma con aviones militares para guiar la senda de la lava y minimizar los daños que las coladas están generando.
"¿No hay un avión que vuela y que pueda hacer caer? Llegar y hacer caer ¡blooom! y yo, oriento la lava en una dirección. Igual lo que yo digo es un disparate. A mí me da la impresión que desde el punto de vista tecnológico hay que probarlo", explicó Casimiro Curbelo.
Curbelo descartó el uso de maquinaria pesada, e insistió en el uso de bombas: "Situémonos en una realidad de una balsa que pierde agua y queremos que fluya de golpe, habrá que actuar con un sistema que haga caer una pequeña bomba explosiva y destruir una parte de pantalla y que salga todo a la vez".
La técnica aludida no es novedosa y ya se probó antaño en Italia, Hawái e Islandia, pero con resultados dispares y a menudo fútiles.
La idea no es descabellada, pero los expertos dudan de su eficacia