La Policía de la India ha detenido a más de 600 personas en cientos de redadas en la disputada región de Cachemira, en el marco de una nueva ofensiva contra grupos separatistas tras la explosión de un vehículo cerca del histórico Fuerte Rojo, este lunes en Nueva Delhi, que dejó al menos ocho muertos y una veintena de heridos y ha sido calificada por el Gobierno indio como un "atentado terrorista".
"La Policía de Jammu y Cachemira sigue comprometida con actuar de forma imparcial contra todos los enemigos de la paz y la estabilidad", declaró un alto funcionario policial bajo condición de anonimato, confirmando la detención de más de 600 personas en los últimos tres días.
"Atentado terrorista" perpetrado por "fuerzas antinacionales
El Gabinete de Ministros de la India calificó este miércoles 12 de noviembre la explosión de un coche bomba ocurrida el lunes en la capital como un ataque terrorista perpetrado por "fuerzas antinacionales", aunque no han detallado públicamente las pruebas relacionadas con el atentado.
Horas antes, las autoridades habían informado de la detención de un grupo de siete hombres de la conflictiva región de Cachemira, a quienes se les habrían incautado armas y material para fabricar bombas.
Ya el martes, las autoridades anunciaron que investigaban el hecho como un posible acto de terrorismo, una medida que otorga a los organismos investigadores mayores facultades para arrestar o detener personas.