La Fiscalía francesa abrió este jueves una investigación por "sospecha de envenenamiento" de la periodista rusa Marina Ovsyannikova, refugiada en Francia tras irrumpir el año pasado en la televisión estatal con un cartel en contra de la guerra en Ucrania. La reportera se sintió mal en plena calle el jueves en París, según fuentes coincidentes, y afirmó haber sido envenenada por los rusos, indicó otra fuente cercana al caso.
Los investigadores tomaron muestras en su domicilio y la fiscalía de París confirmó la apertura de una investigación. Una tercera fuente precisó que "de momento" no había ningún elemento que apuntara a un envenenamiento. Sin embargo, no sería el primer caso.
La periodista, que huyó de Rusia en octubre de 2022, mostró una pancarta en contra de la guerra durante un programa de noticias vespertino en marzo de 2022, tras lo que fue brevemente detenida. "Detengan la guerra, no crean en la propaganda, les están mintiendo aquí", decía. Un tribunal ruso la sentenció este mes en ausencia a ocho años de cárcel por otra protesta que protagonizó frente al Kremlin en julio de 2022, tras lo que fue detenida de nuevo. El suyo fue el último ejemplo de una ofensiva rusa contra la disidencia que se ha intensificado desde que Rusia invadió Ucrania hace casi 20 meses. La escala de la represión no tiene precedentes en la Rusia postsoviética.
El organismo de control de medios Reporteros Sin Fronteras, que ayudó a Ovsyannikova a escapar de Rusia y establecerse en Francia, dijo que su equipo ha estado "a su lado" desde que buscó atención médica. El grupo, conocido también por su sigla francesa RSF, no tuvo más información sobre lo sucedido.
Fuente: DW / lgc (afp/ap)