La Organización Mundial de la Salud (OMS) publicó este martes nuevos datos que muestran la baja tasa mundial de impuestos aplicados a productos poco saludables como el alcohol y las bebidas azucaradas.
Cada año mueren en el mundo 2,6 millones de personas a causa del consumo de alcohol y más de ocho millones a causa de una dieta malsana; la aplicación de impuestos sobre el alcohol y las bebidas carbonatadas ayudaría a reducir estas muertes.
Aunque 108 países gravan algún tipo de bebida azucarada, el impuesto designado por término medio representa sólo el 6,6% del precio del refresco.
Por otra parte, aunque al menos 148 países han aplicado impuestos especiales a las bebidas alcohólicas a nivel nacional, el vino está exento de impuestos especiales en al menos 22 países, la mayoría de ellos en Europa.
Por término medio, a nivel global, la proporción de los impuestos especiales en el precio de la marca de cerveza más vendida es del 17,2%. En el caso de las bebidas espirituosas, es del 26,5%.
Sin embargo, la agencia recordó que un estudio de 2017 muestra que los impuestos que aumentan los precios del alcohol en un 50% ayudarían a evitar más de 21 millones de muertes en 50 años y generarían casi 17 billones de dólares en ingresos adicionales.