En muchas colonias de la capital mexiquense se tiene la costumbre de colocar las bolsas de basura de las casas en las banquetas para que los recolectores lleguen a este punto y se lleven todo en un solo viaje.
Sin embargo, la mala imagen que esto genera a la ciudad es lamentable pues muchas veces estos residuos duran días en estos lugares atrayendo la atención de perros en situación de calle quienes buscan alimento, por lo que rompen las bolsas y riegan todos los deshechos.