El acitrón, el dulce cristalizado usado para adornar roscas de Reyes, está prohibido en México porque pone en riesgo a la biznaga, una planta que está en peligro de extinción. Y quién la dañe, trafique, capture, posea, transporte o acopie puede ir a la cárcel.
Desde 2021, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) restringió el consumo de acitrón porque su producción pone en riesgo a la biznaga.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realiza anualmente diversos operativos para frenar el tráfico ilegal de especies de vida silvestre.
En 2005, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sagarpa) clasificó a la biznaga como una especie en peligro de extinción, según la norma NOM-059-SEMARNAT-2010. Está sujeta a protección especial y otras especies de biznagas están en peligro o amenazadas.
Según el Código Penal Federal puede haber hasta 9 años de cárcel o una multa a quien dañe o realice cualquier actividad con fines de tráfico, capture o posea, transporte o acopie o saque del país productos o subproductos de una especie de flora endémica que esté amenazada o en peligro de extinción, de acuerdo con una nota de Chilango.
Hay dos especies de biznagas de las que se obtiene el acitrón: la biznaga “burra” y la “barril” de acitrón, que crecen en zonas áridas y semiáridas de México, como Puebla, Oaxaca, Chihuahua, Querétaro, Coahuila, San Luis Potosí, Nuevo León, Hidalgo, Durango, Baja California, Sonora, Zacatecas y Sinaloa.
Según la Semarnat, crecen hasta 40 centímetros en un lapso de 14 a 40 años. Las que miden más de un metro tienen alrededor de 200 años.
Aseguró que son plantas únicas y su periodo para que sean productivas es muy largo. “Reproducirlos a escala industrial es una misión imposible”, añadió la dependencia.
La biznaga también está en peligro por su comercio ilegal, ya sea para usarla como alimento o por su rareza, ya que es una cactácea codiciada por los coleccionistas.