El viernes pasado se cumplieron 7 años del secuestro y asesinato de Carlos Eduardo Martínez González. Su padre Alfredo Martínez, recuerda ese 14 de febrero que vio por última vez al más joven de sus hijos, sin saber que iniciaría una lucha que le robaría la paz, la salud y los recursos económicos con los que contaba para su vejez.
Carlos Eduardo salió de su hogar para acudir al Colegio Montessori, donde para celebrar el Día del Amor y la Amistad, habían preparado una kermés, por lo que la seguridad de la escuela fue casi nula, lo que fue aprovechado por sus plagiarios para llevarse al menor.
El joven de 16 años de edad salió del inmueble, donde se encontró con una mujer, quien trabajaba para su padre, por lo que aprovechándose de la confianza lo subió a una camioneta donde la esperaban varios sujetos para llevar al menor a una casa en San Mateo Atenco.
Dos días después de su secuestro Carlos Eduardo fue asesinado, cuando sus captores lo arrojaron del Puente Calderón, en la autopista Tenango - Ixtapan de la Sal, a pesar de mantener una negociación para su liberación. Sin embargo, por el modus operandi de este grupo de delincuentes se presume que su intención principal fue obtener el dinero y asesinar al menor, debido a que reconoció a las personas que lo secuestraron.
El calvario de Alfredo Martínez Gutiérrez, lo llevó a buscar en hospitales, Semefos y Agencias del Ministerio Público a Carlos Eduardo. Fue hasta seis meses después de perpetrado el secuestro que logró recuperar el cuerpo de su hijo en el Servicio Médico Forense de Tenancingo, donde el cuerpo del menor se encontraba en calidad de desconocido, ya que a su perfil se le integraron características físicas diferentes a las que realmente tenía el menor.
Ante el homicidio de su hijo Alfredo Martínez invirtió tiempo y recursos para dar con los responsables, quienes fueron detenidos en agosto del 2013, logrando asegurar a Beatriz Alejandra Morales Sendo, autora intelectual del plagio y asesinato, así como a sus cómplices materiales Margarito Salas Reyes, Emilio Victoria Rodríguez y Silverio Victoria Hernández, quienes recibieron sentencias de más de 50 años de prisión en marzo del año 2016.
Otro de los implicados en este caso, Erick “N”, a quien se le señala cómo el homicida material del menor, fue capturado hasta septiembre de 2017, pero al momento de su proceso, una Juez determinó su libertad en octubre de 2019, a pesar de que los señalamientos que existen en su contra.
Siete años después del secuestro de su hijo, Alfredo Martínez, hará un último intento en busca de justicia por el asesinato de su hijo, pues este martes se presentará a una audiencia en el Poder Judicial del Estado de México, en la que se tiene que resolver un recurso de apelación que interpuso contra la absolución en contra del asesino material de Carlos Eduardo.
“Es mi último intento. Tengo que lograr que ese delincuente regrese a prisión y pague por lo que le hizo a mi niño. Ya me acabé hasta el último peso, ya les di a llenar a los policías ministeriales, a agentes del Ministerio Público, todos han hecho negocio de la muerte de mi hijo. Ya solo tengo esta última esperanza, ojalá que el nuevo presidente del Tribunal Superior de Justicia, Ricardo Sodi Cuellar, tenga más de sensibilidad que su antecesor y revise la conducta de esta jueza” señaló Alfredo Martínez.