Las comisiones de Planeación y Finanzas Públicas de la Legislatura mexiquense acordaron solicitar a la Secretaría de Finanzas la lista de obras para las que se están solicitando 9 mil 500 millones de pesos de deuda en 2022.
Además del detalle de los cuatro nuevos impuestos que se pretenden crear, antes de dictaminar la Ley de Ingresos del Estado de México para el próximo año.
El panista Francisco Santos, presidente de la Comisión de Finanzas, intentó apresurar el dictamen, bajo el argumento de que ya todos los diputados conocían los aspectos técnicos de las iniciativas, por lo que cualquier observación es mera práctica dilatoria con fines partidistas.
No obstante, Maurilio Hernández, coordinador de Morena, precisó que la decisión sí es técnica, sí es política, pero también social y, por tanto, requiere ser analizada con detenimiento.
Indicó que a su bancada le preocupa el endeudamiento, no porque esté en contra, sino porque desconoce el programa estatal de obras que se pretenden financiar; e inquieta la propuesta para crear cuatro impuestos: dos cedulares (uno empresarial y otro profesional), a casas de empeño y ambiental. Tenemos, enfatizó, la obligación de revisar con detenimiento el proyecto y la facultad de hacer propuestas alternativas.
El priista Enrique Jacob también urgió a votar el financiamiento, al considerar que la decisión sólo requiere apegarse a la ley y al sistema de alertas conforme al que la entidad podría endeudarse, sin riesgo, por más de 26 mil millones.
Expuso que dos terceras partes de los pasivos solicitados (casi 6 mil millones) serán empleados en obras de conectividad con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA); mil 145 millones serán para el Fondo Estatal de Fortalecimiento Municipal (FEFOM) y 2 mil 400 millones para 74 proyectos de obras públicas estatales, infraestructura hidráulica, movilidad y drenaje
El morenista Isaac Montoya indicó que los nuevos impuestos van contra la política de no cargar más la mano a la sociedad y a los contribuyentes cautivos; los sujetos de impuestos cedulares, destacó, ya pagan ISR, ISRTP e IVA.
La medida, alertó, propiciará elusión y evasión fiscal. Lo mejor, consideró, sería eficientar la recaudación y redistribuir el gasto.
A su parecer, no se explican las propuestas de 21 mil millones extras para gasto corriente y servicios personales, ni aumentos de mil 600 millones a la plantilla del magisterio en las más elevadas jerarquías sin que se creen más planteles educativos.
El priista Guillermo Zamacona justificó que las empresas deducirán el impuesto cedular al pagar el ISR; y justificó que el recurso de los hospitales no se percibe porque el gobernador Alfredo del Mazo prefirió invertir el recurso en la rehabilitación de más de 700 clínicas de atención primaria a la salud en lugar de en nosocomios que requieren una inversión mayor, como el hospital oncológico de Ecatepec, cuya conclusión será más cara que construir un nuevo hospital.
Su compañero Braulio Álvarez dijo que este año el gobierno estatal recibió 4 mil 500 millones de pesos menos en participaciones federales por el recorte de más de un millón de habitantes en el Censo 2020.
Afirmó que el proyecto de Paquete Fiscal tiene un carácter social porque ofrece diez tipos de subsidios a los empresarios, como el del ISN por la contratación de empleados de los sectores indígena y amnistiado.
El morenista Daniel Sibaja se pronunció porque paguen más impuestos los que tienen más; acusó falta de eficiencia estatal recaudatoria y consideró que los 355 millones que se pretenden recaudar con los nuevos impuestos es una cantidad que puede solventarse con otras medidas.
Expuso que la administración delmacista ha obtenido recursos federales extras en más de 30 mil millones, comparados con los 21 mil millones extras en participaciones del sexenio anterior y, pese a ello, decrece la inversión pública productiva en 11%; planteó que el gobierno federal ya anunció aumentos para las obras que se construyen en el Estado de México, y lamentó que en la entidad no existan datos abiertos, pese a que se han solicitado.
El panista Francisco Santos insistió en al menos aprobar en lo inmediato los casi 6 mil millones de pesos en endeudamiento para las obras federales, en tanto se analizan las locales, e indicó que, en reunión con el Secretario de Finanzas, se le propuso que el impuesto cedular se cobre a quienes tienen ingresos superiores a los 25 mil pesos mensuales, dado que 80% de los contribuyentes se encuentran por debajo, y los derechos registrales de escrituras sólo en inmuebles con valor catastral superior a 3 millones de pesos. La dependencia, afirmó, ofreció realizar una nueva proyección.
El morenista Faustino de la Cruz alertó que el problema es la falta credibilidad en las autoridades, pues mucho dinero se va por el caño de la corrupción.
Dijo que mientras el incremento a Desarrollo Social irá a Salario Rosa, el Centro Oncológico de Ecatepec sigue como “elefante blanco”.
Para decidir si se autoriza deuda, expuso, necesitamos el listado de proyectos de obras, con costos y planos, para evitar sobrecostos como el del interurbano México-Toluca u obras cerradas como el auditorio de Tecámac.
Cuestionó la remodelación de la Plaza de los Mártires, que no es prioritaria, en lugar de equipar un hospital, incrementar la matrícula en las universidades para formar médicos, resolver la inseguridad o recuperar las barrancas invadidas en la Sierra de Guadalupe.
“No podemos aprobar fast-track y no podemos cargar más a la sociedad la corrupción del gobierno mexiquense”, señaló.
La morenista Carmen de la Rosa, presidenta de la Comisión de Planeación, precisó que los impuestos cedulares y el ISR son distintos, por lo que no se puede acreditar uno con otro. Y agregó que si el gobierno estatal no tenía considerada una pandemia, menos la población, por lo que no es momento para establecer nuevos impuestos.
La pevemista María Luisa Mendoza pidió convocar a las cámaras empresariales para que opinen sobre el impuesto cedular, y al Instituto Hacendario por las deudas que se quiere autorizar a los municipios con cargo al FEFOM.