Por mayoría de votos, la Legislatura del Estado de México reintegró al municipio de Cuautitlán México el poblado y el ejido de San Mateo Ixtacalco, junto con sus comunidades “La Capilla” y “El Salado”, actualmente reconocidas como territorio de Cuautitlán Izcalli.
La diputada panista Karla Fiesco, quien además es alcaldesa electa de Izcalli, pidió, en un primer momento la moción suspensiva para que el dictamen se estudiara una vez más, en virtud de que el reparto de ese territorio es un tema resuelto por la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), sin embargo, no consiguió el respaldo mayoritario.
También pidió tomar en cuenta el punto de vista de la población y realizar, para estos efectos, un ejercicio de Parlamento Abierto.
Por su parte, el petista Armando Bautista, quien también aspira a convertirse, en algún momento, en alcalde de la demarcación, advirtió que la zona de 18 kilómetros que resultó afectada es industrial, y consideró necesario que el dictamen tomara en cuenta y especificara lo que representa en términos de recaudación.
También indicó que, hasta ahora, Cuautitlán Izcalli es el único municipio mexiquense creado con el fin de convertirse en municipio modelo, de tal manera que a conciencia se diseñó la zona habitacional, la recreativa, la laboral, etc., por lo que se entiende que San Mateo Ixtacalco tiene su razón de ser.
Mientras que el morenista Juan Pablo Villagómez, presidente de la Comisión de Límites Territoriales del Estado de México y sus Municipios, recordó que en marzo de 2019 se solicitó el inicio del Procedimiento para la Solución del diferendo limítrofe intermunicipal en contra del municipio de Cuautitlán Izcalli; el análisis requirió cerca de dos años, en el cual participó la Comisión Estatal de Límites Territoriales; se revisaron pruebas documentales, estudios de agrimensura, topográficos y asesoría de especialistas.
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Durante el plazo del estudio, afirmó Villagómez, Fiesco García nunca se acercó para involucrarse en el tema, o en los recorridos del área del diferendo, a pesar de que las reuniones eran públicas.
Planteó que los amparos en revisión promovidos contra lo que la panista considera cosa juzgada, arrojaron fallos en favor de Cuautitlán México.
Su correligionario, Alfredo González, aseguró que la Comisión de Límites Territoriales realizó un trabajo apegado a la ley reglamentaria para la solución del conflicto territorial, y se notificó sobre las visitas de inspección para conocer los polígonos en discusión.
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“Esta comisión está haciendo su trabajo y se dejan a salvo los derechos que correspondan a los municipios para que, en lo sucesivo, hagan valer lo que a su derecho corresponda”, dijo.
En tanto, el también morenista Gabriel Gutiérrez precisó que la comisión legislativa utilizó los mecanismos legales y elementos diversos, por lo que no se puede acusar que se trata de una decisión arbitraria, pues hubo alrededor de 30 recorridos y reuniones para el dictamen final del diferendo, y se dio el derecho de audiencia a las autoridades involucradas.
“Al final la decisión fue unánime de la Comisión de Límites Territoriales. Estoy de acuerdo que el tema de las consultas debe de ser valorado, espero que ahora cuando se avale una nueva Constitución se reglamente este tema”, indicó.
Destacó que es la primera vez que la Legislatura local ejerce su facultad de dictaminar un diferendo limítrofe, sin ninguna intención a favor o en contra de alguno de los municipios, pues sólo se actuó como la ley faculta, aunque quedan a salvo los derechos de los involucrados a impugnar la resolución.