Luego de que el pasado lunes cientos de comerciantes realizaran una marcha hacia el Palacio Municipal en reclamo por más espacios para que puedan operar, este miércoles las inmediaciones de la Terminal de Autobuses de Toluca y el Mercado Juárez amanecieron cerradas y custodiadas por elementos antimotines de la capital mexiquense y de la Policía Montada.
De acuerdo con algunos locatarios de la zona, a inicios de año se había tomado una medida similar que les permitió recuperar las banquetas, el flujo de los compradores, disminuir la presencia de carteristas y farderas, así como tener el espacio más limpio, sin embargo, tan pronto como se retiraron los policías, los ambulantes regresaron.
“Ojalá esta vez no estén dos semanas, o si no se pueden quedar aquí para siempre que por lo menos sí detengan a los ambulantes que se instalen. Que hagan valer la ley, no es que queramos perros guardianes 24/7, sino que queremos paz en la colonia Valle Verde, no es mucho pedir. Está muy bien que estén los policías, a ver cuánto tiempo respetan los ambulantes”, señalaron.
De acuerdo con información del ayuntamiento, tanto la zona Termina-Mercado Juárez como el centro histórico se han convertido en los puntos prioritarios para evitar que se comercialicen todo tipo de productos en las banquetas.
Asimismo, se señaló que durante los operativos participan elementos de la Policía Municipal, la Dirección de Gobierno y la de Desarrollo Económico, además de que los viernes de tianguis se suman elementos del Ejército, la Guardia Nacional y la policía estatal con la finalidad de evitar conatos de enfrentamientos como sucedió en Palmillas hace dos semanas, cuando se detectó la operación de grupos de choque que portan armas blancas y de fuego.
Desde hace dos años, el Bando Municipal establece que el ambulantaje en el municipio está prohibido, pero no fue sino hasta esta edición que se modificó para considerarse una falta grave sancionada con un arresto inconmutable de 24 a 36 horas para quien incurra en ésta.