Aunque el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia del Estado de México (DIFEM) tiene en estudio 128 solicitudes de adopción de las niñas y niños que tiene bajo su tutela, estadísticamente apenas 10% de las parejas interesadas cumplirán con los requisitos para lograrlo, reconoció Karina Labastida, su titular.
La presidenta del DIFEM enlistó que en la actualidad la dependencia a su cargo tiene la tutela de 138 menores, mientras otros 270 se encuentran en situación jurídica no resuelta.
Indicó que, paralelamente, a estas alturas han recibido y están en estudio 128 solicitudes de adopción. Sin embargo, aclaró que una cosa es realizar la solicitud, y otra muy distinta que los peticionarios cumplan con todos los requisitos establecidos por la ley.
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Históricamente, manifestó, sólo 10% cumple con todo y puede acceder a la adopción, pues a los interesados se practica antes estudio de trabajo social, económico, psicológico, y es en éste último donde muchos no pasan la prueba; por ejemplo, expuso, “cuando se detecta que algún potencial papá o mamá puede ser violentador, no vamos a exponer a uno de nuestros niños”.
Reconoció que las reformas jurídicas han agilizado los procesos de adopción, pues “el mejor lugar donde pueden estar los niños y adolescente es con una familia que les pueda dar respeto, amor”.
Tanto así, prosiguió, que el Estado de México ocupa el primer lugar nacional de adopciones, y este año se han concretado un promedio de 30, de las que dos son homoparentales.
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En todos los casos, dijo, se da seguimiento durante dos años para garantizar el éxito de las adopciones, “porque en ocasiones, ya una vez viviendo en familia, no se adaptan, entonces regresan los niños”, como ha ocurrido en dos casos, desde que asumió la presidenta del sistema.
En estos casos, indicó que el impacto psicológico en los niños es menor cuando son ellos quienes dicen que no quieren estar en esa familia.
Reconoció que los solicitantes suelen concentrarse en los bebés, pro expuso que el DIFEM está dirigiendo sus esfuerzos también a la adopción de niños mayores de 5 años y adolescentes; por esta razón, está optando por la promoción de adopciones internacionales.
Por ejemplo, manifestó, en Estados Unidos es donde más adoptan adolescentes, y por eso se está capacitando a los menores con clases de inglés como una estrategia les permita esa modalidad.
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Este procedimiento, indicó, suele ser más tardado.
Labastida Sotelo detalló que a los niños y adolescentes que no son adoptados también se les prepara para conseguir un empleo digno o para seguir sus estudios; incluso el DIFEM también puede pagar sus estudios.
Algunos, prosiguió, ya son adultos, se autodenominan “Niños DIFEM”, y cinco o seis han sido empleados en el mismo sistema. “Llegaron desde pequeñitos, ya son como de mi edad, de 48 años, y ya están trabajando con nosotros. También tenemos escuela técnica, pero la intención es, aunque cumplan la mayoría de edad, darles la oportunidad de salir adelante”, concluyó.