Pese a que la iniciativa no se aprobó cuando fue mayoría en la anterior Legislatura local, el grupo parlamentario de Morena presentó, una vez más, la propuesta para formalizar la Interrupción Legal del Embarazo antes de las 12 semanas de gestación; por su parte, Movimiento Ciudadano (MC) propuso elevar este derecho a rango constitucional.
La primera propuesta, presentada por la diputada Anaís Burgos, prevé despenalizar el aborto, pero también modificaciones en materia de salud a partir de reformas al Código Administrativo, al Código Civil y Ley para eliminar Violencia contra las Mujeres, lo que, a su decir, la distingue de las otras cuatro aprobadas en igual número de entidades federativas.
Esta propuesta de vanguardia, dijo, surge de las mujeres, colectivos y especialistas que participaron en el parlamento abierto, en el entendido de que los derechos sexuales y reproductivos son centrales para disminuir la desigualdad y eliminar las barreras políticas que históricamente han aislado y discriminado a las mujeres.
“No se nos puede criminalizar por tomar decisiones sobre nuestro cuerpo; es necesario dejar de lado ideologías, creencias; (nosotras) nos hemos puesto de acuerdo sobre nuestros cuerpos y nuestras vidas, no sobre el aborto”, dijo.
La congresista recordó que hay grupos parlamentarios que han manifestado su rechazo total a la propuesta, y consideró que eso significa que están en contra de las mujeres.
Enfatizó que el tema no es político, moral o de principios, no se puede reducir a sólo estar en favor o en contra, pues es una experiencia muy compleja sobre el que es necesario una decisión.
“No vamos a debatir si es bueno o malo el aborto, sino qué hacemos con la realidad, pues cada día mujeres de todas las edades, de todas las clases sociales, abortan de manera clandestina, lo que resulta inseguro. No podemos hablar de derechos humanos si prevalecen visiones machistas que violentan el derecho de las mujeres a decidir sobre su proyecto de vida”, esgrimió.
Recordó que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) ya marcó el camino sobre el tema, y los legisladores deben ser responsables y asumir el reto de cara a ciudadanos.
Enfatizó que despenalizar no es lo mismo que legalizar, que la despenalización protegerá a las mujeres más pobres y vulnerables, y permitirá deslegitimar el estatus quo de abusos, discriminación, desigualdad y discriminación machista.
“Legislemos por salud y autonomía, por el poder de decisión sobre nuestros cuerpos y el derecho del proyecto de nuestras vidas… aborto legal para no morir, seguro y gratuito, que sea ley”, apeló.
Por su parte, el grupo parlamentario de Movimiento Ciudadano (MC) promovió una iniciativa de reforma al artículo quinto de la Constitución local, para que se eleve a rango constitucional el derecho de las mujeres al embarazo, la maternidad y el aborto.
Ambas iniciativas fueron turnadas a las comisiones de Gobernación, Salud e Igualdad de Género; ésta última sólo dará su opinión sobre la segunda propuesta.