Vecinos de Naucalpan reúnen firmas para solicitar a la Comisión de Vigilancia del Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) practique una auditoría especial a la administración de la exalcaldesa Patricia Durán Reveles, al considerar que pudo incurrir en malos manejos financieros, pues mientras se arguyó falta de recursos para cubrir los salarios de los empleados del ayuntamiento y para la prestación de servicios públicos, durante su administración se gastaron dos mil 400 millones de pesos más a los autorizados para nómina.
El documento, promovido entre otras asociaciones civiles por Tribuna Urbana y por la Asociación de Colonos de Lomas Verdes, plantea que para el ejercicio fiscal 2019 el cabildo autorizó mil 999 millones 545 mil 129 pesos en el Capítulo Mil (Servicios Personales), mientras la carátula del Presupuesto de Egresos registró 2 mil 650 millones 140 mil 931 pesos para este fin. Lo anterior, significa que se gastaron 650 millones 595 mil 801 pesos más.
Para el ejercicio fiscal 2020, el cabildo autorizó el ejercicio de poco más de 2 mil 014 millones para este capítulo, pero la carátula refiere que se asignaron 2 mil 926 millones 880 mil 613 pesos, es decir, se gastaron 912 millones 856 mil 235 pesos más de lo avalado, lo que desde el punto de vista de los colonos es injustificado porque las oficinas del ayuntamiento cerraron o disminuyeron su flujo debido al aislamiento social obligado por la pandemia de Covid-19.
Para el ejercicio fiscal 2021, los ediles autorizaron el ejercicio de 2 mil 038 millones 875 mil 293 pesos para 2021, no obstante, durante la sesión convocada para el 21 de diciembre (que no se llevó a efecto a falta de quórum del ala identificada con la alcaldesa), los regidores advirtieron que el gasto en nómina fue de 2 mil 890 millones de pesos; es decir, el sobre ejercicio (gasto extra) fue de 850 millones de pesos.
En total, entre 2019 y 2021 Durán Reveles habría gastado 2 mil 400 millones de pesos extras en nómina, según estos documentos; por el contrario, durante toda la administración fue deficiente la prestación de servicios públicos, y la problemática se agudizó a partir de que la presidenta municipal perdió las elecciones y, con ello, la posibilidad de repetir en el cargo.
Los vecinos consideran que al cierre de cada ejercicio fiscal cabe la posibilidad de que se hayan cometido desviaciones porque ni siquiera se pagó la totalidad de sueldos, salarios y prestaciones a los empleados, mientras los tabuladores de mandos medios y superiores se dispararon.
“La rendición de cuentas no es un privilegio, es un derecho, como ciudadanos no solo debemos ser partícipes en la elección de nuestros gobernantes, sino también en vigilar como se utilizan las contribuciones; los invitamos a participar con su firma”, plantea la convocatoria abierta a los vecinos para promover la revisión.