De cara a las elecciones intermedias 2021, la "izquierda" mexiquense se encuentra inmersa en luchas por la reconfiguración de sus dirigencias nacional y estatal que, al menos en materia de estabilidad, la dejan en desventaja en comparación con institutos políticos como el Partido Revolucionario Institucional (PRI).
A la fecha, sólo el tricolor ha definido a Alejandra del Moral su presidenta estatal para el periodo 2019-2023, lo que significa que llegará a los comicios de alcaldes y diputados sin sobresaltos para la toma de decisiones ni desgastes previos.
En caso similar se encuentran los partidos Acción Nacional (PAN) y Verde Ecologista de México (PVEM), pues en el primer caso Jorge Inzunza, fue designado su líder en el Estado de México para el periodo 2018-2021; en el segundo Alberto Couttolenc, se mantendrá a la cabeza hasta pasadas las elecciones.
En contraste, Morena, partido ganador en las últimas elecciones, se encuentra sumergido en disputas internas entre expresiones como el Grupo Texcoco, que lidera el senador Higinio Martínez; Los Puros, de Daniel Serrano, y los López obradoristas que reúne a varios alcaldes y representantes populares, entre ellos al de Tlalnepantla.
Adicionalmente, aún no existe claridad sobre las fechas y mecanismos para renovar sus espacios, vacantes desde que Horacio Duarte, su ex presidente estatal, se integró al gabinete federal, lo que prolonga la disputa interna y la aparente acefalía.
En el caso del Partido de la Revolución Democrática (PRD), desde mayo de 2019 existe una dirección estatal colegiada (que replica la nacional), integrada por un representante de cada una de las 5 expresiones de mayor militancia que, sin embargo, poco brilla, mientras a nivel nacional tentativamente se habla de la renovación para abril de este año, lo que podría representarle una nueva disputa, con todo y que su fortaleza quedó menguada a partir de los últimos resultados electorales.
En cuanto al Partido del Trabajo (PT), acaba de lanzar la convocatoria que permite el registro de interesados a convertirse en dirigentes estatales y coordinadores municipales entre este martes y el 23 de febrero próximo, según sea el caso; quienes resulten designados se mantendrán en la encomienda durante tres años, lo que permitirá que al proceso electoral intermedio no lleguen tan desgastados, a menos que no logren zanjar las diferencias que el proceso interno de estos meses deje.