El grupo parlamentario de Morena trabaja a marchas forzadas en una reforma al Código Penal del Estado de México que tipifique como delitos graves la corrupción, el influyentismo y el uso de programas sociales con fines electorales.
La diputada local Azucena Cisneros adelantó que espera presentar la propuesta esta misma semana, para que sea aprobada a la brevedad, con la finalidad de que entre en vigencia para el próximo proceso electoral local: "Estamos trabajando la iniciativa. Espero que en una semana (la presentemos)", dijo.
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Recordó que a nivel federal ambas conductas ya son un delito grave. En congruencia, consideró, en el Estado de México tendría que plantearse, dada su calidad, sancionarlas con penas que vayan de 40 a 70 años de prisión.
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Para Cisneros Coss, en el Estado de México, con el objetivo de que no se sancione, fue creada la Fiscalía Anticorrupción, la cual ya demostró no ser un mecanismo eficaz, sino distractor, con un entramado interminable para no arrojar resultados, pues hasta ahora no se sabe que alguien haya sido enjuiciado ni sancionado con cárcel por actos de corrupción. Además, dijo, esas conductas se convierten en meras faltas administrativas, mientras que el mecanismo de denuncia debe repensarse para hacerlo accesible a la población en general, pues de otra manera seguirá sin pasar nada.
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En el caso de los programas sociales, destacó la necesidad de sancionar su manejo con fines electorales, pues se trata de una cultura en el Estado de México, entidad "laboratorio de los desvíos, uso de recursos públicos y compra del voto"; por lo tanto, destacó, no debe quedar como un simple delito electoral.