Tras años de lucha en búsqueda de los derechos para la comunidad LGBTTI en el Estado de México, activistas aseguran que se han logrado importantes avances en los últimos años; sin embargo, uno de los pendientes urgentes es que se apruebe la Ley de Identidad de Género, la cual es prioridad para la comunidad transexual.
Por ello, La Red de Defensores Diversos del Estado de México señaló que es necesario que las personas identificadas con otro género tengan derecho a un nombre conforme su identidad; desafortunadamente, al no contar con los documentos oficiales, provoca que queden segregados en distintos ámbitos, uno es el de la educación y desarrollo profesional, así como el acceso a la salud.
Ante la actual situación de emergencia sanitaria, Leonardo Espinoza López, integrante del colectivo, indicó que dicho segmento de la población y sus familias quedan en mayor vulnerabilidad al no poder acceder a la seguridad social.
“La gente lo necesita. Necesitan asegurar a su familia, necesitamos tengan empatía. La comunidad trans no pueden acceder a la salud y es una situación apremiante”, expresó.
Por su parte, Selene, mujer trans integrante del colectivo, mencionó que lograr una identidad de género les permitirá desarrollar sus carreras profesionales; lo anterior debido a que, a pesar de que algunas lograron acceder a estudios, no pueden desempeñar sus carreras, obligándoles así a ejercer otros oficios, dejando sus capacidades, conocimientos y talentos congelados.
“Exigimos el derecho de una identidad para tener un trabajo correspondiente con nuestros estudios, nos topamos con una pared difícil de brincar porque nuestro nombre no corresponde con lo que somos, buscamos oportunidades conforme nuestro estudio, no tenemos reconocimiento laboral”, dijo.
Ante las recientes voces de movimientos feministas que se han pronunciado en contra de la ley, confían que no sean obstáculo para que la cámara legislativa local actual logre sacarla, pues señalaron que solo se trata de un pequeño grupo que no representa a todos los colectivos feministas, a quienes invitaron a la empatía y lejos de confrontaciones, ataques y rechazo que puede generar violencia, unan fuerzas.