Miles de empresas atraviesan por una situación compleja ante la emergencia sanitaria del COVID-19, hecho que vino a romper con el estado de confort en el que muchas de estas operaban, evidenciando su falta de preparación para hacer frente a este nuevo reto; por ello, la innovación resultará fundamental para que no mueran.
Alejandro Álvarez, especialista en negocios, destacó que el 2020 es un año que ha traído muchos cambios que orillaron a las empresas a adaptarse a las nuevas demandas de productos, servicios y tipos de mercados, a través de un proceso de innovación en el que se incluyen la inspiración y creatividad.
Durante el seminario "Encuentro de Negocios", del Patronato de Empresarios del Estado de México, explicó que, en definitiva, las empresas no pueden seguir haciendo las cosas como las venían haciendo, proceso que a lo largo de generaciones va cambiando, pero que durante este año atípico se aceleró y demostró que deben estar preparados ante cualquier eventualidad.
Recomendó como pasos para la innovación la inspiración y creatividad, camino para revisar las tendencias del mercado y ver qué han hecho otras empresas para tener éxito, lo que, aclaró, no se trata de copiar, sino de tomar referencias: “Son punto de partida”. Cuestión que, dijo, en muchas ocasiones detiene a las personas porque creen estar obligadas a hacer algo nuevo, cuando en realidad se trata de “hacerlo mejor y diferente”.
Refirió que 98% de las innovaciones recae en hacerlo mejor y solo 2% en algo nuevo. Para ello, se deben enfocar en resolver necesidades inmediatas, resolver la problemática que la competencia y la misma sociedad no ha logrado resolver, e invitó a detenerse, observar y analizar cuáles son los cambios, entender qué está pasando y “adaptarse o morir”, Irina palabra entendida como la pérdida de clientes, o ir dejando de ser rentables poco a poco, hasta que la empresa desaparezca.
Finalmente, destacó que la emergencia sanitaria ha obligado a muchos a reactivarse y trabajar en incertidumbre, cuestión que, refirió, seguirá durante largo tiempo, por lo que es necesario aprender a trabajar bajo esa incertidumbre y ya no confiarse en que todo pasará pronto y volverá a ser como antes, como sucedió al inicio de la pandemia.