Las mujeres indígenas mexiquenses se enfrentan con situaciones y problemáticas complejas de violencia e inequidad de género, con insuficiente apoyo institucional en este rubro, afirmó la académica Silvia García Fajardo, al participar en el panel virtual “Violencia de género contra mujeres rurales e indígenas en el Estado de México”, organizado por la Universidad Autónoma del Estado de México.
Durante la segunda sesión del Seminario Permanente de Género, Violencia y Políticas Públicas de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, García Fajardo y las también académicas Jessica Ceballos Juárez, Reyna del Prado Campos y Yenifar Carina Gómez Madrid dieron a conocer su experiencia, así como los hallazgos y análisis que obtuvieron al realizar la investigación “La violencia contra las mujeres rurales e indígenas en San Felipe del Progreso”.
García Fajardo indicó que además de la violencia estructural que viven estas comunidades por usos y costumbres, marginación, pobreza, exclusión, falta de oportunidades y desigualdades históricas, encontró que existen grandes dificultades para acceder a los apoyos y derechos institucionales con perspectiva de género.
La especialista aseveró que la carencia de diagnósticos sobre cómo viven o padecen las mujeres indígenas la violencia de género en cualquiera de sus variables, impide apoyarlas de manera satisfactoria, así como generar políticas públicas adecuadas y eficientes.
“¿De qué les sirven los apoyos sociales a las mujeres si cuando llegan a hospitales o buscan denunciar algún maltrato no son atendidas e, incluso, son discriminadas, o se da por sentado por parte de los servidores públicos que están acostumbradas a tratos inadecuados?”
Al respecto, Ceballos Juárez urgió a sensibilizar y concientizar a la sociedad, y sobre todo a las instituciones que brindan apoyo y seguimiento a la violencia de género que viven las comunidades indígenas. También consideró que falta capacitación con perspectiva de género para que los servidores públicos puedan realizar de manera adecuada su trabajo, acerquen las instituciones a las comunidades y difundan sus funciones para que puedan hacer uso de ellas.
Refirió que uno de los principales problemas que enfrentan las mujeres indígenas desde una perspectiva de género es el trabajo no remunerado que realizan, incluso, cumpliendo hasta triples jornadas.
Las especialistas reconocieron que, en la actualidad, son las asociaciones civiles las que más conocimiento, diagnóstico e incidencia tienen sobre la situaciones existentes en las comunidades indígenas; sin embargo, la falta de recursos les impide ejercer un impacto mayor.