Luego de que el Ayuntamiento de Toluca retirara de las calles del centro de la ciudad, así como de las inmediaciones de la terminal-Mercado Juárez, a vendedores ambulantes, como parte de las acciones para evitar aglomeraciones y la propagación del COVID-19, las autoridades han detectado que estos se están instalando en las delegaciones y comunidades del municipio.
El secretario del Ayuntamiento, Ricardo Moreno Bastida, reconoció que mantener el control de los comerciantes informales es complejo, más allá de la contingencia, pues aunque su presencia ha disminuido en los puntos mencionados, ahora han recibido denuncias de su incremento en otros.
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Algunos de los puntos a los que se han mudado son San Cristobal Huichochitlán, Capultitlán, San Pablo Autopan, Seminario, Cacalomacán, Santa Ana Tlalpatitlán, entre otros.
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“Tenemos un problema. El comercio ambulante se nos está moviendo a las comunidades, donde es muy difícil de contener, porque los movemos de Santa Ana y se nos van a Cacalomacan, al rato al Seminario, en fin, a todos lados. Sin embargo, estamos actuando”, expresó.
Además, dijo, han detectado que se están generando nuevos espacios de venta informal, esto a través de las denuncias que las mismas autoridades auxiliares les han hecho llegar para que sean retirados.
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El secretario añadió que el Ayuntamiento ha logrado contener y aplicar, en lo posible, las medidas de prevención en los 36 tianguis instalados en la capital mexiquense, así como la suspensión de dos tianguis populares: el Aviación Autopan y el conocido como La Pulga.