La epilepsia es un padecimiento crónico del cerebro, con el cual se pueden presentar síntomas repentinos en forma de convulsiones o falta de coordinación; sin embargo, al tratarse de manera oportuna, combinado con terapia psicológica y un estilo de vida saludable, se puede controlar y permitir que el paciente desarrolle su vida personal y profesional.
En el marco del Día Mundial de la Epilepsia, que se conmemora este 8 de febrero, Gabriela Enríquez Mendoza, neuróloga del Hospital General Regional (HGR) No. 220 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Estado de México Poniente, precisó que la epilepsia no únicamente son convulsiones, pues puede manifestarse con síntomas leves, por ello la importancia de estar atentos para buscar la atención médica oportuna.
Algunos de esos síntomas pueden ser movimientos involuntarios o pérdida de memoria, menciona que la población debe estar pendiente “ante la presencia de los síntomas y solicitar atención médica oportuna, a fin de realizar el diagnóstico temprano e iniciar tratamiento lo antes posible”.
Algunas causales de esta enfermedad, refirió que son antecedentes familiares, como la falta de oxigenación durante el parto, crisis febriles en la infancia, alguna lesión cerebral, traumatismos de cráneo, así como malformaciones e infecciones de tipo cerebral; pero, también la puede desencadenar el descontrol en los electrolitos, el consumo de alcohol, drogas e incluso la falta de sueño.
En México, la epilepsia afecta a dos de cada 100 personas, por lo que Enríquez Mendoza resaltó la importancia de concientizar e informar a la población sobre el padecimiento; para que así, en caso de presenciar alguna crisis, se actúe con prudencia y calma, evitando realizar alguna maniobra para estabilizar al paciente, “es mejor esperar a que la crisis pase para buscar ayuda de un profesional de la salud”, dijo.