En 2015, la ONG estadounidense Friends of Big Bear Valley comenzó con una serie de transmisiones en vivo para mostrar el día a día de “Jackie” y “Shadow”, una pareja de águilas calva, la cual ya goza de gran popularidad en el internet.
De acuerdo con su página de Facebook, ambos ejemplares habitan en el bosque de Big Bear Lake, a 160 kilómetros al noreste de Los Ángeles, California, esto en la cima de un pino Jeffrey de 44 metros de altura.
“Con el tiempo, la gente se encariñó con `Jackie´ y `Shadow´. Suelen compararse entre ellos, y observan su conexión con la naturaleza”, comenta Sandy Steers, directora ejecutiva de la organización.
Ahora, tras una década de emisiones, la pareja sorprendió a sus fieles seguidores con el nacimiento de tres crías, las cuales, curiosamente, han eclosionado de sus respectivos huevos durante la madrugada.
Este acontecimiento cobra aún más relevancia si se recuerdan los intentos anteriores de tener polluelos. Resulta que en 2023, pusieron dos huevos, pero éstos fueron comidos por cuervos invasores. Un año después, en 2024, hubo tres huevos, pero ninguno eclosionó, posiblemente debido al frío extremo o a la falta de oxígeno.
Para fortuna de este par de águilas, Steers asegura que todo parece ir bien con los bebés y que, incluso, no debería de sorprender si deciden tener más hijos en el futuro.
“Las águilas en general son aves longevas. Tienen una baja reproducción anual, pero a lo largo de su vida se reponen con creces en la población”, señaló.