A inicios de este mes, se registró en el Parque Nacional de Yellowstone, Estados Unidos, el nacimiento de un búfalo blanco, hecho que no resulta muy común en la naturaleza y que ha provocado diferentes reacciones entre la sociedad.
Prueba de ello es que a este suceso se la ha relacionado con una profecía indígena, vinculada a un escenario positivo, aunque igual se ha tomado como una advertencia.
Según expertos en la materia, la llegada de este ejemplar de búfalo albino, fotografiado por una chica llamada Erin Braaten, recuerda el mito de la Mujer Búfalo Blanco, una de las leyendas más populares entre los pueblos indígenas que habitan las Grandes Llanuras de América del Norte, especialmente entre los Lakota.
La obra escrita por Edward S. Curtis cuenta que en un tiempo de gran necesidad y desesperación, cuando las tribus estaban sufriendo hambre y escasez, dos jóvenes cazadores se encontraron con una figura sagrada. Se trataba de más ni menos que la entidad femenina conocida como la Mujer Búfalo Blanco, quien decidió acudir al campamento Lakota a enseñarle a los mimebros de la tribu ritos sagrados y la importancia de la Pipa Sagrada, instrumento de paz, oración y comunión.
Tras ello, la Mujer Búfalo Blanco prometió que volvería una vez que los tiempos de gran necesidad aparecieran, y que su regreso marcaría el inicio de una nueva era de paz y armonía para este pueblo.
Desde aquel día, dicha promesa representa una fuente de esperanza y consuelo para los Lakota, que hoy día aún esperan el cumplimiento de esta profecía.