Un inesperado reencuentro tuvo lugar en las costas de Belice. Mientras buscaban otra especie, un equipo del Laboratorio de Ecología y Conservación de Depredadores de la Universidad Internacional de Florida, Estados Unidos, se topó con el vertebrado más longevo del mundo, un tiburón de Groenlandia (Somniosus microcephalus), el cual tiene alrededor de 500 años de edad.
Así como lo lees. Según los biólogos, su objetivo principal era estudiar el comportamiento de los tiburones tigre; no obstante, durante uno de los recorridos apareció el antiquísimo ejemplar.
La criatura, de andar lento, suele habitar en el norte del océano Atlántico y el océano Glacial Ártico, cerca de las costas de Groenlandia e Islandia. Por este motivo, los encargados de la expedición se encontraban realmente sorprendidos, ya que el espécimen estaba muy lejos de su hogar.
Eso sí, no desaprovecharon la oportunidad de apreciar a uno de los seres vivos más viejos de la historia moderna, cuya increíble edad puede deberse a sus particulares condiciones de desarrollo. Y es que por lo general, un tiburón de Groenlandia únicamente crece un centímetro al año y su madurez sexual puede tardar más de un siglo en alcanzarse; lo anterior debido a las bajas temperaturas de las aguas donde nadan.