Una manada de aproximadamente 15 elefantes salvajes ha caminado poco más de 500 kilómetros desde una reserva natural de las montañas del suroeste de China, hasta la ciudad de Kunming, donde autoridades locales han tratado de detener a los animales y mantenerlos alejados, en medida de lo posible, de las zonas habitadas.
Las autoridades asiáticas aún dicen desconocer el por qué la manada abandonó, desde el año pasado, la reserva natural en donde habitaban libremente cerca de la ciudad de Pu er. Hasta ese entonces, el grupo estaba conformado por 16 animales; sin embargo, el gobierno chino informó que dos ejemplares regresaron, mientras que una cría nació durante el trayecto.
Debido al paso de los pesados mamíferos, las carreteras cercanas han sido bloqueadas durante las últimas semanas. Además, se alzaron barreras y se utilizó comida, como cebo, para tratar de mantenerlos alejados de Kunming y de otras zonas pobladas.
Chen Mingyong, un experto en elefantes asiáticos, informó que este incidente se ha convertido en la migración de elefantes salvajes de mayor distancia registrada en la historia de China. “Es posible que su líder carezca de experiencia y haya hecho que todo el grupo se haya perdido”, asegura Chen.
Por último, se calcula que los daños causados hasta ahora tanto en daño material como de cultivos ascienden a 1.1 millones de dólares.