Un estudio realizado por Greenpeace, en colaboración con las universidades de Stellenbosch (Sudáfrica) y Exeter (Reino Unido), ha registrado, por primera vez, “el disparo”, un sonido impulsivo emitido por la ballena jorobada (Megaptera novaeangliae) cuyo significado por ahora se desconoce.
“Todavía no entendemos completamente lo que significa esta `llamada de disparo´, pero fue fantástico haberla grabado por primera vez”, reconoció en un comunicado la doctora Kirsten Thompson, líder de la investigación.
El estudio, cuyos resultados fueron publicados este jueves, se llevó a cabo en 2019 en el monte submarino Vema del océano Atlántico, a mil kilómetros de la costa de Sudáfrica. En él fueron captadas hasta 600 llamadas acústicas a lo largo de 11 días, siendo las más habituales las emitidas entre madres y crías para comunicarse.
“Además de registrar `el disparo´, nuestra investigación confirmó que las ballenas jorobadas que pasan por Vema, durante su largo viaje a través de los océanos, se están alimentando”, señaló Thompson.
“Hoy más que nunca necesitamos una protección global de los océanos del mundo para garantizar que estos hábitats y ejemplares puedan persistir”, concluyó.