Esta semana, agentes de la Guardia Civil española aseguraron 127 piezas de marfil de gran valor comercial y artístico durante una operación en un anticuario de la ciudad de Valencia.
A través de un comunicado, el Servicio español de Protección de la Naturaleza (Seprona) calificó esta incautación como un duro golpe al tráfico de este material; sin embargo, condenó el enorme daño causado a la fauna protegida.
Y es que la misma dependencia, estima que para la elaboración de cada pieza se sacrificó, por lo menos, a un elefante. En ese sentido, apunta que el “daño a la fauna” podría ascender hasta los 14 millones de euros.
Entre las obras confiscadas destaca un cuerno de marfil tallado con mucho detalle; una esfera concéntrica con elementos ornamentales; y una embarcación de estilo oriental.