Luego de que el pasado domingo 21 de agosto una embarcación se incendiara cerca de playa Balandra, en Baja California Sur, provocando el derrame de una gran cantidad de combustible, las autoridades tomaron la decisión de cerrar este lugar y declarar una contingencia ambiental.
Y es que el derrame hizo que la playa se tiñera de color negro, por lo que la Secretaría de Marina ya se encuentra trabajando en la zona para que éste no se extienda a otros lugares, en donde ya se han detectado sustancias como aceite, diesel, ceniza y hollín.
En cuanto a los responsables, el gobernador de Baja California Sur, Victor Castro Cosío, declaró que el dueño del yate incendiado será quien pague por todos los daños provocados en la playa Balandra.
Por el momento, ni el gobierno del estado ni la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) han revelado datos sobre el área afectada, cantidad de litros de combustible despirgado y afectaciones a la flora y fauna del lugar.