Con el paso de los años, nuestras mascotas pueden desarrollar diversas enfermedades, y muchas de ellas resultan muy difíciles de detectar. Afortunadamente, si ponemos atención a su comportamiento, podremos ayudarlos a tiempo.
Es el caso del Síndrome de Disfunción Cognitiva (SDC), un padecimiento neurodegenerativo similar al Alzheimer entre los seres humanos, y que afecta de manera importante la salud de nuestras mascotas. Se estima que uno de cada cuatro perros de más de ocho años de edad padece esta condición, aunque la mayoría de los casos se dan en caninos mayores de quince años.
A continuación, conoce cuáles son los síntomas del SDC en los perros y cómo puedes ayudar a tu mascota en caso de que lo padezca.
Síntomas
1. Tiene problemas de memoria. Puede suceder que tu perro no entienda algo que usualmente era sencillo o rutinario para él; por ejemplo, una orden que aprendió desde cachorro. Y es que los perros que padecen este síndrome pueden llegar a olvidar personas y hasta experiencias.
2. Dificultad al concentrarse. Es posible que a tu mascota le cueste trabajo estar atenta a tus órdenes, ya sea porque no las entiende o porque no puede mantener puesta su atención por mucho tiempo. En estos casos, trata de ser paciente y comprensivo con tu peludo.
3. Desorientación. Si tu canino está perdiendo la memoria, es normal que también se olvide de los lugares en los que ha estado.
4. No tiene ganas de hacer nada. Puede que en ocasiones tu perro no tenga ganas de jugar o moverse; incluso, hasta podría volverse un poco distante y alejarse de ti. Ayúdalo e intenta mimarlo, pero sin agobiarlo. Recuerda que si sufre de esta enfermedad, tendrás ser muy paciente con él.
5. Cambios repentinos de conducta. Si tu perro empieza a contraer este síndrome, lo más seguro es que su conducta empiece a cambiar de un día para otro.
¿Cómo ayudarlo?
Antes que nada, lo ideal es llevarlo con un veterinario cuando comiences a notar algunos de los síntomas antes mencionados. Él realizará una evaluación y te dará el tratamiento adecuado para tu lomito.
Y por último, pero no menos importante, debes entender que tu perro te necesitará más que nunca y que debes estar junto a él. La mejor manera de ayudarlo será tenerle paciencia; evita regañarlo y explícale de nuevo las cosas que olvide.