Desde el comienzo del conflicto entre Rusia y Ucrania, el 24 de febrero, internet se ha llenado de cientos de historias, las cuales reflejan el duro momento que están viviendo las personas oriundas de estos países.
Sin embargo, entre tantos relatos, también hay algunos que pueden sacarnos una sonrisa y pensar que pronto todo estará bien. Tal y como sucedió con la siguiente joven, quien tuvo que abandonar Ucrania y para sorpresa de todos, se llevó consigo a su perrita.
Resulta que en las últimas horas se hizo viral en redes sociales el caso de Arya Aldrin, una chica originaria de la India que hace no mucho se encontraba en Ucrania estudiando medicina. No obstante, cuando las cosas se salieron de control, no tuvo otra opción más que salir del país por su propia seguridad; pero eso sí, se negó a irse si no iba junto a “Zaira”, su husky siberiana que más que su mascota, es su compañera de vida.
La historia de este par de amigas comenzó en 2020, cuando Arya llegó a territorio ucraniano para iniciar sus estudios en la Universidad Médica Nacional Pirogov Memorial. Un año después, una conocida le regaló a “Zaira”, quien en ese momento era apenas una cachorrita y casi de inmediato crearon un lazo muy fuerte que hasta la actualidad nadie ha podido destruir.
Pero como mencionamos anteriormente, la vida de la joven y su mascota cambió de un momento a otro cuando comenzó la invasión rusa. En ese momento, varios de sus amigos le recomendaron encargar a su peluda a un refugio o a una persona de confianza, pero Arya se negaba rotundamente.
Por fortuna, luego de muchos días llenos de incertidumbre y gracias al apoyo de distintas fundaciones y organizaciones en pro de los animales, la joven consiguió un pasaporte especial para mascotas, documentos de vacunación y un microchip para “Zaira”.
De esta manera, ambas iniciaron un largo viaje para salir de Ucrania a través de la frontera con Rumania, para después tomar un vuelo, organizado por el gobierno de la India, con destino a Delhi.
Pero ahí no acabó todo, pues de dicha ciudad tomaron otro vuelo hasta Kochi y luego de todo lo que tuvieron que pasar, por fin llegaron a la casa de Arya.
“Pasara lo que pasara, sabía que no podía dejar a `Zaira´. Simplemente no puedo explicar la sensación de alivió que sentí cuando cruzamos la frontera…Sabía que nadie más la amaría y mimaría como yo”, declaró la chica a distintos medios locales cuando arribó a su país natal.