En lo que va del año, el número de gatos abandonados en el Reino Unido ha aumentado alrededor del 30%, situación que refleja una clara crisis de bienestar animal.
De acuerdo con la organización Cats Protection, la crisis sanitaria acontecida en 2019 provocó un aumento en la adopción de estas mascotas, con más de 3 millones de hogares adquiriendo un felino. Sin embargo, a cuatro años de dicho suceso, el escenario ha cambiado, pues ahora las familias británicas están luchando por mantener a sus ejemplares debido al aumento de costos en comida, seguros y facturas veterinarias.
Derivado de lo anterior, el mismo centro explicó que la adopción de mininos poco a poco se está ralentizando. Y es que reubicar a un animal tarda alrededor de 39 días; además, el número de felinos en el Reino Unido cayó de 11 millones en 2023 a 10.6 millones en lo que va del 2024. Por si fuera poco, un estudio reciente encontró que 1 de cada 3 dueños se siente afectado por la situación económica actual.
Pese a lo anterior, Cats Protection aseguró que todavía pueden implementarse acciones para revertir esta crisis, tales como ofrecer información y apoyo a quienes buscan adoptar; diseñar planes para evitar la toma de decisiones críticas; impulsar campañas de sensibilización sobre el bienestar animal; y mejorar la cooperación entre organizaciones, autoridades y la industria veterinaria, a fin de abordar problemas de costos y disponibilidad de servicios.