Todo el que tenga una mascota sabrá de sobra que no siempre la alimentación que nosotros seguimos es la más adecuada para ellos. Elegir un alimento es algo que afecta a absolutamente todas las especies, y que es importnate tenerlo siempre muy en cuenta para que nuestra mascota pueda vivir de la forma más saludable posible.
Para esta ocasión, nos centraremos en una de las especies que más nos acompañan en nuestro día a día: los gatos. Y es que aunque parezca que los gatos son animales todoterreno y son capaces de comer cualquier cosa, esta afrimación está muy lejos de ser verdad, ya que existen una gran cantidad de alimentos que nosotros podemos consumir con normalidad pero para los gatos, podrían ser mortales.
Evitar el Chocolate, la Leche y el Café
Comencemos por tres alimentos que podrían acabar haciendo que tu gato sufra dolores, y que encontrarás muy fácilmente en tu cocina: el chocolate, la leche y el café. Por curioso que pueda parecer, la leche es uno de esos alimentos prohibidos que ningún gato debería tomar; pues este podría acabar provocándole diarreas y problemas en el estómago.
El chocolate, por otra parte, contiene teobromina. A los gatos les resulta muy complicado eliminar la teobromina de su cuerpo, y si la consumen en grandes cantidades, podrían llegar a intoxicarse.
Por último, la cafeína afecta a los gatos en el mismo modo en el que nos afectan a nosotros pero con una gran diferencia: ellos pesan diez veces menos que nosotros. Es decir, que las cantidades que ingieran, por mínimas que sean, acabarán resultándoles tóxicas.
Las Frutas
Debido al organismo tan particular que tienen los gatos, la alimentación basada en frutas puede acabar resultándoles muy perjudicial. Frutas como las uvas y las pasas, además de los cítricos son las que debes de tener alejadas de tu minino.
Por su parte, los aguacates contienen una sustancia fungicida llamada persina, que es especialmente tóxica para los gatos.
El Atún y el Higado (en grandes cantidades)
Aunque lo hayas visto mil veces en distintas páginas webs y hasta en la televisión, no es bueno que tu mascota consuma atún. Y es que este pescado contiene altas dosis de mercurio que podría acabar envenenando a los gatos; además, no contiene los nutrientes necesarios como para mantener a tu gato correctamente alimentado.
El hígado, por otra parte, contiene una gran cantidad de vitamina A, que podría acabar provocando en el minino una Hipervitaminosis (trastorno en el que se tiene demasiada vitamina A en el cuerpo).
No al Azúcar, a la Sal y a los Condimentos
Estos tres alimentos no son tóxicos en sí mismos, pero sí que pueden llegar a tener consecuencias terribles en grandes cantidades. Sucede como con muchos de los alimentos que hemos mencionado antes; los gatos pesan una décima parte de lo que pesamos nosotros, y es por eso que las cantidades que nosotros tomamos para ellos son excesivas.
Así qué ya lo sabes, quizás sea hora de que reorganizes la dieta de tu querido gato y así, puedas evitarte problemas a futuro.