Este lunes 18 de abril, Sudáfrica amaneció con docenas de personas desaparecidas y más de 400 muertos a causa de las fuertes inundaciones en la provincia de KwaZulu-Natal. Ante la imposibilidad de contener el desastre natural, las autoridades locales establecieron un estado de emergencia, ya que la cantidad de agua que está arrasando el área es equivalente a “varios meses de lluvia”.
En un comunicado a la población, el gobierno sudafricano describió la catástrofe como “una de las peores tormentas climáticas de la historia”, pues hasta ahora, se tiene registro de 443 víctimas mortales sin contar a las varias docenas de desaparecidos.
Deslaves, daños y desesperación
La provincia de KwaZulu-Natal se caracteriza por ser una de las más rebosantes de vida en todo Sudáfrica. Por este motivo, las autoridades decidieron utilizar extensas hectáreas de tierra a áreas naturales protegidas, en donde suelen habitar felinos de gran tamaño y otras especies en peligro de extinción.
Ubicada al sureste del país africano, esta región enfrenta una de las peores catástrofes naturales de las que se tiene registro en la historia contemporánea. A pesar de que la suma de daños generales a la infraestructura ya supera los 600 millones de dólares, se espera que las lluvias continúen.
Por este motivo, las brigadas de rescate, conformadas por miembros del ejército y equipos de voluntariado internacionales, tienen la encomienda de encontrar a quienes siguen bajo los escombros, así como recuperar los restos de quienes, tristemente, no lograron sobrevivir.
Los damnificados de Durban
Pese a los problemas que están afectando a la provincia de KwaZulo-Natal, los peores estragos se han registrado en el puerto de Durban.
Y es que nunca antes este lugar había sido sometido a precipitaciones tan violentas y devastadoras. Al respecto, Tafadzwanashe Mabhaudhi, de la Universidad de Durban, asegura que, en gran medida, las inundaciones en Sudáfrica son una consecuencia directa de la crisis climática global que se vive actualmente.
Prueba de ello es que en tan sólo un fin de semana, esta provincia recibió el equivalente al 75% de las lluvias anuales en todo el país.
Por su parte, el Servicio Meteorológico de Sudáfrica (SAWS, por sus siglas en inglés) señaló que esta no será la primera vez que ocurran eventos así. Por el contrario, se espera que éstos aumenten su intensidad y capacidad de destrucción.