La plantación de nuevos corales en arrecifes dañados puede provocar la rápida recuperación de estos ecosistemas en tiempo récord, toda vez que los animales animales coloniales restaurados crecen tan rápido como los sanos y cumplen sus mismas funciones tan sólo cuatro años después de haber sido colocados.
Todo lo anterior fue comprobado mediante un experimento llevado a cabo en el arrecife de sur de Sulawesi, en Indonesia, el cual contó con la participación de investigadores de las universidades británicas de Exeter y Lancaster, la Agencia Nacional de Investigación e Innovación y la iniciativa Mars Sustainable Solutions.
En un artículo publicado por la revista Current Biology, los involucrados explicaron que crearon una red continua e interconectada de estructuras de acero recubiertas de arena, que sirvieron de base para trasplantar fragmentos de coral sano en 12 zonas muy deterioradas de aquella zona, donde ya no crecían larvas de nuevos corales.
Una vez terminada la plantación, hicieron seguimiento de las áreas restauradas con el objetivo de ver cómo crecían los corales y cuánto tardaba el arrecife en recuperar las funciones propias de un ecosistema sano: captación de carbono (CO2), protección de la costa frente a las tormentas y proporcionar un hábitat ideal a las especies marinas.
El resultado fue que tras cuatro años del trasplante se triplicó la extensión de la cobertura coralina y el tamaño de las colonias de coral.
“Al cabo de cuatro años, los lugares restaurados no se distinguían de los arrecifes sanos cercanos en todos los parámetros investigados. Esto significa que en ese tiempo los arrecifes restaurados crecen a la misma velocidad que los sanos, proporcionando un hábitat similar para la vida marina y protegiendo eficazmente la isla adyacente, las olas y la erosión”, precisó Inas Lange, una de las autoras.
“Sin duda, se trata de un descubrimiento esperanzador, que nos dice que si logramos mantener unas condiciones climáticas que permitan la supervivencia de los corales será posible restaurar arrecifes sumamente dañados y así vuelvan a ser ecosistemas sanos y funcionales en poco tiempo”, señaló.