Los ríos pertenecientes al Cerrado brasileño, la sabana que se extiende por el centro del país sudamericano, han perdido un 27% de su caudal de agua en los últimos 50 años, reveló este lunes un informe publicado por la organización Ambiental Media.
Según explica el estudio, factores como la deforestación y el cambio climático han provocado que la apodada “cuna de agua de Brasil” pierda, en promedio, alrededor de mil 300 metros cúbicos por segundo, líquido suficiente para llenar unas 30 albercas olímpicas cada minuto.
Para llegar a estos resultados, los autores se basaron en datos de la Agencia brasileña de Aguas (ANA) recopilados entre las décadas de 1970 y 2020 en seis grandes cuencas del Cerrado: Araguaia, Paraná, Parnaíba, San Francisco, Taquari y Tocantins.
El análisis de dicha información arrojó que en los años 70, esas cuencas aportaban 4 mil 742 metros cúbicos por segundo; sin embargo, hoy día tal cifra ha descendido a 3 mil 444. Asimismo, desveló que entre 1985 y 2022, su vegetación nativa se redujo un 22%, especialmente de 2003 a 2022, periodo en el cual la deforestación arrasó con aproximadamente 240 mil kilómetros cuadrados.
“Deforestar el Cerrado significa ampliar la sequía y poner en jaque la seguridad hídrica de nuestro país”, alertó Yuri Salmona, autor principal del reporte.