Un nuevo monarca ha asumido el trono y la incertidumbre sobre la corona inglesa es más grande que nunca. Si bien, el rey Carlos III llevaba toda su vida preparándose para el cargo, ahora tendrá que enfrentarse a muchos retos que deberá superar.
En ese sentido, uno de los temas fundamentales que concierne al Reino Unido y los demás países del mundo es la crisis climática, la cual en los últimos años ha avanzado a pasos agigantados.
Prueba de ello es que en lo que va del 2022, el continente europeo presentó temperaturas e incrementos del nivel del mar nunca antes vistos. De hecho, la situación es tan crítica que ciudades enteras se encuentran en riesgo de desaparecer debajo del agua.
No obstante, para fortuna del Reino Unido y las regiones que lo conforman, el rey Carlos III tiene muy presente este tema; pero como mencionamos al inicio, no será fácil enfrentarse a los efectos que ha tenido la corona británica sobre el medio ambiente por décadas: desde la contaminación industrial hasta la pérdida de biodiversidad marina.
“Cualquier líder que se haya tenido que enfrentar a retos tan amenazantes, sabe que el costo de la inacción es mucho mayor al costo de la prevención”, mencionó el nuevo monarca durante su participación en la pasada cumbre del clima.
A pesar de sus esfuerzos como activista ambiental, el país que lo recibirá en el trono se enfrenta actualmente a una fuerte crisis energética derivada del conflicto armado entre Rusia y Ucrania. Aunado a ello, gran parte de las naciones europeas dependen del gas importado de Rusia para abastecer sus ciudades.
En conclusión, el rey Carlos III deberá hacer todo lo que esté en sus manos para no cometer los mismos errores del pasado, y actuar como un líder que se preocupe por ofrecer soluciones ante un problema que ya escaló niveles inimaginables.